Cinco cosas que debes saber sobre la langosta
Cuando se trata de crustáceos, la más famosa de estas criaturas marinas desgranadas es la langosta, con el nombre científico Homarus nephrops ( variedad del Atlántico Norte). Esta extraña criatura submarina también se considera un manjar exquisito o de lujo en muchas partes del mundo. Mientras que la langosta se exporta a numerosos lugares en el mundo, son particularmente populares en América del Norte, debido a la proximidad del país a sus poblaciones marinas.
A pesar de lo deliciosa que es la langosta para muchas personas y los altos precios que ésta conlleva, solo recientemente se ha convertido en una fuente popular de alimentos. De hecho, hasta las primeras partes del siglo 20, casi nadie quería pasar por la tarea de llegar a la carne. Ahora se ha convertido en un alimento extremadamente popular, pero hay más en este crustáceo que su carne mantecosa y una preparación que requiere mucho tiempo; también es beneficioso para nuestra salud en general, ¡un poco más de lo que se dan cuenta!
Hay muchos beneficios deliciosos y nutricionales para comer langosta, algunos de los cuales incluyen la construcción de huesos fuertes, aumentar la función cerebral, promover el crecimiento, acelerar la curación, disminuir la inflamación, aumentar la energía y proteger la salud del corazón. Hoy repasamos cinco cosas que hacen de comer langostas un buen plan:
La salud del corazón
Si bien la langosta tiene una cantidad significativa de sodio, que puede afectar la salud del corazón de manera negativa, las otras grasas beneficiosas que se encuentran en la langosta pueden hacer mucho para prevenir la inflamación y la aterosclerosis. Si tiene problemas cardíacos, probablemente deba evitar la langosta, pero la alta concentración de omega-3 y omega-6 que se encuentra en la langosta en realidad puede ayudar a equilibrar el colesterol en cantidades moderadas.
Mejora la Cognición
Hay una cantidad de minerales y vitaminas únicos que se encuentran en grandes cantidades en langostas, incluida una importante vitamina B, B12, que está directamente relacionada con el mantenimiento de la integridad del nervio y el correcto funcionamiento del sistema nervioso. Además, la langosta es una muy buena fuente de colina, otro nutriente soluble en agua que puede aumentar su producción de neurotransmisores. Esto puede aumentar la función y la eficiencia del cerebro, e incluso protegerlo de los efectos de las enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer y el Parkinson.
Aumenta la energía
Una de las mejores cosas acerca de este manjar submarino es el alto contenido de proteína que se puede encontrar dentro de esa deliciosa carne. La proteína es una parte esencial de nuestra dieta, ya que puede darnos un impulso energético. Mientras que el contenido de proteína en nuestra dieta es necesario para el crecimiento y la reparación, el contenido no utilizado se almacena para su uso como energía. Si ya tiene una dieta alta en proteínas, una dosis semanal de langosta le dará una mayor energía para el trabajo y el placer.
Crecimiento y reparación
Como se mencionó anteriormente, la langosta es una rica fuente de proteínas, que es el componente fundamental de nuestros cuerpos. Al aumentar la ingesta de proteínas, podemos construir nuevas células, reparar tejidos dañados, fortalecer los huesos y, en general, garantizar que todos nuestros sistemas de órganos funcionen de manera efectiva.
Reduce la inflamación
Se ha demostrado que la proteína y el contenido de grasa «bueno» que se encuentra en este crustáceo en realidad pueden provocar una disminución de la inflamación dentro del cuerpo. Los ácidos grasos omega-3 son importantes para mantener nuestro equilibrio de colesterol y también aumentan la producción de prostaglandinas, compuestos lipídicos que pueden proteger el cuerpo. Esto es importante para todo, desde las condiciones artríticas hasta la salud cardiovascular y circulatoria.
Si bien estos beneficios para la salud mencionados anteriormente son impresionantes, es importante recordar que la langosta todavía es bastante alta en sodio y colesterol. Si ya padece presión arterial alta, problemas cardiovasculares o cualquier otra condición de salud, la langosta podría no ser la fuente ideal de estos nutrientes y minerales.
Recurde que todo debe ser consumido con moderación, la carne llena de nutrientes de este crustáceo es un lugar ideal para que la gente obtenga muchos de sus minerales y vitaminas esenciales.