El vino y sus beneficios
Beber vino es un ritual que, a lo largo de la historia, se ha consolidado como uno de los mayores placeres de los que se puede disfrutar. Pero ello también ha llevado a generar falsas creencias sobre sus propiedades, sin embargo, tiiene muchos beneficios como los que enumeramos a continuación:
Beneficios del vino
Mens sana in corpore sano
El consumo de vino activa al gen SIRT1, que impide la formación de nuevas células de grasa y ayuda a movilizar las ya existentes, así como el resveratrol de la uva disminuye las consecuencias negativas de la vida sedentaria. Además, diversos estudios también demuestran que el consumo moderado de vino mejora el funcionamiento del cerebro y, en pequeñas cantidades, previene la demencia. Los científicos creen que se debe a que la elevada presencia de antioxidantes en su composición reduce la inflamación, impiden que las arterias se endurezcan e inhiben la coagulación, lo que mejoraría el riego sanguíneo. Un combinado de beneficios obtenidos con un consumo moderado de vino. La dosis diaria óptima, según los científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts, serían 40 gramos de alcohol al día.
Aumento del placer
Según un estudio de la Universidad de California, beber vino con moderación libera endorfinas en dos áreas del cerebro por lo que aumenta la sensación de placer. En este mismo estudio se apunta que la luz también influye a la hora de degustar estos caldos. Si la luz ambiental es roja o azul el placer y el sabor del vino son mucho más intensos que cuando ésta posee tonalidades verdes o blancas.
Protector solar
A esta conclusión llegaron los investigadores de la Universidad de Barcelona tras estudiar los derivados del vino y de la uva e interpretar que ayudan a reducir los efectos perjudiciales de los rayos ultravioletas. Según estos expertos, los flavonoides que se encuentran en el vino y en las uvas retraen la formación de especies reactivas de oxígeno en la piel expuesta al sol.
Evita la caída de los dientes
La costumbre histórica de curar las infecciones bucales con vino tiene ahora fundamentación teórica tras los estudios realizados por científicos italianos. Tanto el vino blanco como el tinto evitan la caída de los dientes. Esta bebida alcohólica frena el crecimiento de los estreptococos de la boca, bacterias vinculadas a las caries, la gingivitis y al dolor de garganta. Por lo que, una vez más, el consumo moderado es beneficioso para nuestra dentadura e higiene bucal.
Además también es un limpiador del paladar, ya que al tomarlo durante la comida ayuda a percibir mejor los sabores. Esto es por las propiedades astringentes del vino que evitan la excesiva sensación de grasa en esta zona de la boca causada por algunos alimentos y que permite así degustar con mayor disfrute de la comida.
Antidepresivo natural
Tras un estudio comprendido en un período de siete años, un equipo de investigadores de varias universidades de España ha manifestado que las personas que bebían entre dos y siete vasos de vino a la semana eran menos propensos a ser diagnosticados con depresión. Los participantes tuvieron que completar un cuestionario que incluía detalles sobre su consumo de alcohol y de su salud mental. Además también se tuvieron en cuenta otros aspectos de sus estilos de vida relacionados con el desarrollo de este trastorno y el riesgo de sufrir depresión seguía siendo significativamente menor.
Aumenta los niveles de ácidos grasos Omega3
El vino es mejor que otras bebidas alcohólicas para aumentar los niveles de ácidos grasos Omega3 en el plasma y en las células rojas de la sangre, según revelan estudios de diversos investigadores europeos. Los ácidos grasos Omega3 se derivan generalmente del pescado y protegen contra la enfermedad cardíaca coronaria.